[TA] | Global talk | Covid-19 demuestra cómo nuestro enfoque de la propiedad intelectual amenaza la salud, la seguridad y los medios de vida.

Martes 26 | 8:00 a.m.

Miriam Brett

Common Wealth Think Tank & The Democracy Collaborative

Si bien tiene la intención de estimular la innovación, el enfoque actual de la propiedad intelectual promueve la acumulación y protección de activos por parte de un conjunto reducido de empresas multinacionales, mientras no desarrolla y distribuye de manera equitativa productos y servicios, ni compensa adecuadamente a los trabajadores y contribuyentes o maximiza la innovación. Necesitamos un nuevo enfoque que reconozca cuán fundamentales son estos sistemas para construir una economía más equitativa, sostenible y democrática. Common Wealth y The Democracy Collaborative establecen políticas basadas en la propiedad pública democrática:

  • Incrementar la inversión pública en I+D social y ambientalmente beneficiosa:
    • Aumentar la inversión pública en I+D hasta al menos el 2% del PIB durante los próximos 10 años;
    • Establecer bancos de inversión pública como parte de una estrategia industrial.
  • Hacer crecer el interés público en las creaciones de la mente:
    • Creación de organismos de propiedad intelectual común y exigir que la propiedad intelectual generada a partir de I + D financiada con fondos públicos se ponga en propiedad común;
    • Fondos públicos de capital riesgo para ayudar a dirigir la innovación en industrias clave.
  • Transferencia de tecnología global y reparaciones
    • Transferir ciertos derechos de propiedad intelectual, eliminar las restricciones de propiedad intelectual sobre ciertas innovaciones críticas y revisar las reglas de propiedad intelectual a favor de las empresas y del recinto que predominan en los sistemas comerciales, por ejemplo, las contribuciones obligatorias al Centro de transferencia de tecnología de ARNm Covid-19 de la OMS y al Fondo de patentes de medicamentos de propiedad intelectual.
  • Asegurar que la PI sirva al bien común:
    • Principios fiscales y prácticas laborales justas: poner fin a los esquemas de elusión fiscal y exigir que la propiedad intelectual sea revocada o denegada a empresas privadas debido a abusos laborales o de bienes públicos que se coloquen en los bienes comunes;
    • Rendimientos sociales y ambientales: vinculación de la protección de la propiedad intelectual con ciertos estándares de bienestar público (por ejemplo, acceso equitativo a los medicamentos);
    • Recuperar el control de la inversión, por ejemplo, mediante el establecimiento de regulaciones que obliguen a las empresas a reinvertir una determinada parte de las ganancias en I + D.
  • Desafía el poder corporativo
    • Renegociar acuerdos comerciales que restrinjan excesivamente el libre flujo de información y tecnología.
    • Crear empresas del sector público para diversificar el panorama en industrias concentradas y poderosas como la farmacéutica.

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